Para demostrar cómo funciona el Criterio Kelly, debemos asumir que puedes analizar la probabilidad de una apuesta que sea exitosa con un grado razonable de precisión. Con esta información, podemos usar el criterio Kelly para calcular la apuesta, con la siguiente formula:
(bp – q) / b = f
En esta ecuación, “b” se refiere a las múltiples probabilidades disponibles de la apuesta en cuestión. Por ejemplo, si las probabilidades decimales de una apuesta son 4.0, entonces la letra B es 3. Las letras “p” y “q” se refieren a la probabilidad de la apuesta de ganar y perder respectivamente. Así que, si una apuesta tiene un 55% de chance de ganar, entonces p será 0.55 y q será 0.45. Finalmente, “f” es la respuesta a la ecuación y se refiere a la fracción de tu presupuesto total a utilizar en esta apuesta.
Si tomamos un ejemplo de una apuesta donde las probabilidades decimales sean del 4.0 y la probabilidad de esa apuesta de ganar sean del 35%, podemos aplicar los números relevantes a la ecuación de la siguiente manera:
((3*0.35)-0.65) / 2 = 0.4
Basado en el criterio de Kelly, para esta apuesta, a pesar de que la probabilidad de perder es más alta que la de ganar, tu apuesta debería ser el 40% de tu presupuesto.